En el Nombre glorioso de
Nuestro Señor Jesucristo,
que bajó de los Cielos
para ser mi Salvador y Redentor,
se encarnó en el
seno de María Santísima
y se hizo hombre y
padeció por nosotros, sus hermanos,
pido ayuda para
salir de estos problemas económicos
que ahora hacen
inestable y agobian mi vida y mi hogar,
y de su Santa
Cruz, que es mi guía y consuelo,
rompo las cadenas,
rompo todas ataduras
y todo aquello que
sea obstáculo y me impide progresar.
Yo ....... desato y disuelvo toda envidia, mal de ojo,
Yo ....... desato y disuelvo toda envidia, mal de ojo,
maldición, conjuro, hechizo
o maleficio
que haya recaído
sobre mi economía
a causa de la
maldad de mis enemigos,
o por los pecados
e injusticias de mis antepasados,
libero todo lo
malo que pueda estar impidiendo
las bendiciones
económicas que Dios tenga para mí,
y suplico con inmensa fe ponga un
escudo a mi alrededor
para que sea mi protección
poderosa ente todo mal.
Lavo con la Preciosa Sangre de Nuestro Señor Jesucristo
Lavo con la Preciosa Sangre de Nuestro Señor Jesucristo
toda contaminación
espiritual, toda mala vibración,
toda salación y
trabajo de magia
que haya recaído
sobre mis bienes económicos,
ya sea por causa
de las faltas o malas acciones
que con mis bienes
hayan cometido
las personas que
me los entregaron,
o los que yo,
consciente o inconsciente, he cometido.
Invoco la Divina Providencia de Dios,
Invoco la Divina Providencia de Dios,
con la cual
nuestro Padre Todopoderoso
premia con alegría
nuestra paciencia y cura nuestras penas
y en la que confío
y creo firmemente,
para que me
otorgue su asistencia una vez más
y rompa toda
injerencia e intromisión de mis adversarios
sobre mi
patrimonio, sobre mis bienes, sobre mis finanzas,
sobre todo lo que
tengo y lo que pueda tener,
para que la
bendición de Dios lo multiplique en abundancia
lo acreciente y lo
haga rendir con copiosidad
y nunca me falte
todo lo que preciso,
y así lograr que
mi vida esté llena de riqueza y buena suerte,
y mi capital y
todo lo que me llegue
por gracia y favor de las bendiciones
y de la Divina Providencia de Dios,
se incremente y
produzca miles de beneficios.
Yo ....... me
comprometo desde este mismo instante
a ser mas
caritativo y dar limosna a los que lo necesiten,
a hacer el bien y
ayudar a los que sufran por carencias.
Por último, nombro a la Santísima Virgen María
Por último, nombro a la Santísima Virgen María
administradora de
todas mis pertenencias,
de las que ya
poseo o pueda poseer,
para que con ellas
me alcance
la riqueza eterna
del Reino de su Hijo Jesús.
Amén. +
Amén. +
Rezar tres Padrenuestros, Avemaría y Gloria.
La oración y los rezos se hacen tres días seguidos.
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